FMI advierte sobre debilidad de la actual década y llama a recuperar estabilidad de precios y de deuda

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, sostuvo este jueves que esta década podría ser recordada como “los tibios años veinte”, debido al lento crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el mundo y el descontento popular.

En la antesala de las próximas reuniones de primavera (boreal) del FMI y el Banco Mundial, la autoridad adelantó en un discurso en Washington que en el próximo informe de perspectivas para la economía mundial -que se presentará el próximo martes-, la expansión “es marginalmente más fuerte gracias a la pujante actividad en Estados Unidos y muchas economías de mercados emergentes”.

Además, destacó que la solidez del consumo de los hogares, la inversión empresarial y la disipación de los problemas en las cadenas de suministro han aportado al panorama, en conjunto con una disminución de la inflación.

“Hemos evitado una recesión mundial y un período de estanflación, que algunos habían presagiado”, dijo la jefa del FMI.

Georgieva también indicó que la resiliencia de la economía mundial está respaldada por los mercados laborales “vigorosos” y una fuerza de trabajo en expansión, señalando que la fortaleza de la oferta de mano de obra obedece en parte a la inmigración, que ayudó sobre todo a los países cuyas poblaciones están envejeciendo. “En general, los datos nos invitan a respirar con alivio. Hemos evitado una recesión mundial y un período de estanflación, que algunos habían presagiado”, dijo la jefa del FMI.

Pese a lo anterior, alertó que “aún hay abundantes motivos de preocupación”, señalando las secuelas de la pandemia con pérdida del PIB mundial de US$ 3,3 billones, con costos que caen de forma desproporcionada en los países más vulnerables.

Como resultado, agregó, las perspectivas a mediano plazo del organismo para el crecimiento global permanecen por debajo de la media histórica, apenas por encima del 3%.

“La causa principal del crecimiento más flojo es una desaceleración considerable y generalizada de la productividad, que según nuestro análisis representa más de la mitad de la desaceleración del crecimiento en las economías avanzadas y de mercados emergentes, y casi la totalidad de la observada en los países de ingreso bajo”, explicó la directora gerente del Fondo Monetario Internacional.

Atención a precios y deuda

Bajo la lógica de la titular del FMI, se debe recuperar la estabilidad de precios y la deuda para no caer en “los tibios años 20”.

En el caso de la inflación, señaló que tocó techo a mediados de 2022 y que para el último trimestre de 2023, el nivel general de inflación en las economías avanzadas descendió a 2,3%; mientras que en los mercados emergentes y en desarrollo se frenó hasta 4,1%.

“Prevemos que esta tendencia continúe en 2024, sentando así las condiciones para que los bancos centrales de las principales economías avanzadas empiecen a recortar las tasas en el segundo semestre del año”, advirtió.

En este contexto, Georgieva hizo un llamado a reponer las reservas fiscales, acusando que están agotadas y los niveles de endeudamiento en la mayoría de los países son demasiado altos.

La personera explicó que en las economías avanzadas -menos Estados Unidos- los pagos de intereses de la deuda pública equivaldrán en promedio a 5% de los ingresos públicos este año y para los países de bajos ingresos alcanzaría el 14%.

“Para la mayoría de los países, las perspectivas de un aterrizaje suave y de mercados laborales dinámicos apuntan a que es el momento justo de actuar, para lograr niveles de deuda que sean sostenibles y acumular reservas más sólidas para hacer frente a shocks futuros”, dijo.

Reuniones de primavera bajo foco de conflictos geopolíticos y crecimiento

Durante la próxima semana se realizarán las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, que reunirá a líderes financieros del mundo y, en el caso de Chile asistirán la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, y el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
La edición 2024 contempla abordar temáticas relacionadas con el impacto económico de las guerras en Gaza y Ucrania y el impacto de la inteligencia artificial en la economía mundial. Esto en un contexto en el que hay expectativas para que los principales bancos centrales inicien sus ciclos de recortes en la tasa de política monetaria, con el retroceso de los precios a nivel mundial.
Además, los conflictos geopolíticos se mantienen presentes: a la guerra en Ucrania se suma la de Gaza, que estalló en octubre pasado y ha mantenido a los mercados y algunos commodities atentos.
Además, los ojos están puestos en el próximo informe de perspectivas económicas mundiales, que ya en enero pronosticó un aterrizaje suave de la economía mundial y elevó su proyección de crecimiento global a 3,1%.
La edición pasada de la reunión, realizada en abril 2023, tuvo como contexto un año desde la invasión de Rusia a Ucrania, golpe geopolítico que impulsó el alza de precios en todo el mundo y mantenía a los bancos centrales con la tasa más alta en años. De esta forma, se abordaron los desafíos de la fragmentación geopolítica, el fortalecimiento de las cadenas de suministro y el cambio climático.